Si el dress code de oficina te limita bastante las opciones a la hora de vestirte cada mañana, este post será tu salvación. Puede parecer que una working girl no tiene muchas posibilidades y normalmente una acaba optando por los grandes clásicos que, sí, son infalibles pero aburren. En la variedad está el gusto, amiga. Y más si eres joven, ese traje de chaqueta te suma años y así nunca te vas a ligar al guapo de la segunda planta. Toma nota de los looks que te acompañarán a partir de ahora en tu jornada laboral.
- Los pantalones tobilleros son de lo más femenino (si tienes unos tobillos bonitos, si los tienes anchos mejor a otra cosa mariposa). Junto a una blusa y un bolso XL hacen un estilismo clásico pero maravilloso.
- Similar al anterior pero esta vez con unos pitillos negros porque no son sólo para looks casual, combínalos con una camisa con volantes y listo. Me encanta el abrigo de pelo.
- Una falda lápiz negra está muy bien pero también recurre a las de cintura marcada y más despegadas para un estilismo muy lady like. Arriba apuesta por el cuero y un maxi collar. Sin duda, es mucho más juvenil.
- Los pantalones con brocados son perfectos para tus jornadas de 9 a 18 horas. A veces, hay que atreverse con otras posibilidades. Un jersey puede parecer poco formal a simple vista pero en este look es simplemente sublime. Añade un collar y unos zapatos arreglados y listo.
- Una falda de plumas es otra posibilidad, perfecta para marcar tu estilo y ser diferente al resto. Un outfit nude ideal para un día de reuniones. En este caso, me gusta dar el toque de color con los zapatos, unos verdes o rosas van genial.
- El animal print no puede faltar. No importa en qué prenda sea...es un acierto seguro.
- Una falda plisada larga es una buena manera de cambiar de vez en cuando y lo mejor es que no importa si aún no estamos muy bronceadas ;)
A aplicar la lección ;)
Besos
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